La Luna brindó el lunes 17 de marzo un impresionante espectáculo a su planeta, la Tierra, donde se la vio más grande y más brillante de lo habitual al encontrarse en su posición más cercana en 18 años.
Este fenómeno único se conoce como "superluna" y se da cuando este acercamiento coincide con la fase de luna llena.
El astro estuvo en su perigeo, el punto más próximo de su órbita a la Tierra, y por primera vez desde 1993 se dieron ambos factores.La Luna apareció un 30 por ciento más brillante y un 14 por ciento mayor de lo normal.
Sin embargo, parte de la espectacularidad de este fenómeno radica en un efecto óptico, ya que en realidad el astro "sólo" se aproxima a la Tierra, según la NASA, 26.323 kilómetros, pero gracias a ello la luna se ve como a través de una gran lupa.
El mejor momento para observar esta fantástica escena es cuando está cerca del horizonte, ya que se produce la famosa "ilusión lunar" y el satélite parece enorme al cernirse sobre árboles y edificios.
Ante la avalancha de dudas sobre el espectáculo lunar, astrónomos de todo el mundo se esfuerzan por aclarar que la posición del satélite en su perigeo no tiene nada que ver con el seísmo, ni tendrá más consecuencias que eventuales enamoramientos, fotografías inigualables y edulcoradas poesías.
Si bien es cierto que este fenómeno traerá grandes mareas, éstas no representan una amenaza, según los astrónomos.
El el próximo 11 de octubre se podrá observar el efecto contrario. El satélite estará en su apogeo, su punto más lejano, y aparecerá un 12,3 por ciento más pequeña. EFE