lunes, 31 de marzo de 2014

Preservación de la fertilidad: Congelar óvulos y espermatozoides



Afortunadamente, hoy en día es posible preservar, de cara a un futuro embarazo, la fertilidad de estas personas que, por razones sociales, económicas o de salud, aplazan la paternidad. Y es que no solamente el deseo voluntario de esperar es el motivo principal de este retraso de la maternidad. También algunas enfermedades, especialmente sus tratamientos, como los oncológicos e inmunosupresores, pueden afectar seriamente a la fertilidad, tanto en mujeres como en hombres. Esto se debe a que los tratamientos utilizados contra el cáncer, por ejemplo, tienen como objetivo destruir aquellas células cancerígenas que se reproducen en el organismo, pero también pueden afectar a otras células y dañar a las reproductoras o a los propios gametos. En los hombres, los tratamientos alteran el número y la morfología de los espermatozoides, así como su material genético. En las mujeres, además de la alteración en la reserva ovárica, el tratamiento puede afectar al equilibrio hormonal que regula la menstruación y el embarazo. Asimismo, hay que considerar posibles intervenciones quirúrgicas necesarias que pueden afectar a zonas anatómicas relacionadas con la reproducción.
Si bien, gracias a las técnicas de preservación y a la reproducción asistida, las probabilidades de lograr un embarazo a edades tardías o tras un tratamiento oncológico, también son mayores.
En el caso de la mujerla vitrificación de ovocitos es una de las alternativas más aconsejables tanto para aquellas que deciden voluntariamente prorrogar la maternidad como para las que por una patología o sus tratamientos, pueden ver afectada su fertilidad. La vitrificación de óvulos permite conservar sus ovocitos para que puedan ser fecundados en un futuro, con muchas garantías de éxito. Esta técnica consta de una primera fase de estimulación ovárica y posteriormente se extraen, mediante punción, los ovocitos que han madurado y que, por último, son crioconservados (solidificación celular a bajas temperaturas y muy rápida) a la espera de que sean requeridos después.
Para los hombres, las técnicas de preservación se realizan mediante la criopreservación o congelación del semen para usarlo más adelante. La muestra puede permanecer congelada el tiempo que sea necesario, siendo siempre apta para su fecundación.
TOMADO DE: REDPAPAS.ORG